NOTICIAS - NOVEDADES
Un coatí en la Sierra de San Javier, Tucumán
Las cámaras trampa del Proyecto Lifeplan capturan la reaparición del coatí en el "Sitio Tucumán", desafiando las creencias de su extinción en la provincia. El regreso del coatí a Tucumán es más que un evento biológico; es un recordatorio de la interconexión de todas las formas de vida. Nos invita a contemplar nuestro papel como custodios de la tierra que compartimos con estas especies, recordándonos que la conservación no es una elección, sino una responsabilidad compartida.
El coatí (Nasua nasua) es una especie de amplia distribución en Sudamérica, desde el sur de Venezuela hasta el norte de Uruguay y Argentina. En nuestro país, se encuentra también ampliamente distribuida, asociada a selvas y bosques húmedos del norte (i.e., Yungas, Chaco, Selva Paranaense y parte del Delta e Islas del Paraná). Es una especie flexible y adaptable, persistiendo incluso en áreas degradadas, fragmentadas y con cierta presión de cacería. De hecho, presenta las densidades poblacionales y tasas de ocupación más altas para carnívoros nativos en el norte de Argentina. Según la última categorización de los mamíferos del país (SAyDS -SAREM, 2019) el coatí se encontraría distribuido en las Yungas de Tucumán, aproximadamente hasta el sur de Famaillá. Sin embargo, se la consideraba extinta en la provincia desde 1948, aunque varios registros recientes indican lo contrario. Es interesante que los registros y menciones de observaciones más recientes ocurren en distintos sectores de la provincia: el Parque Nacional Los Alisos y la Reserva Provincial Santa Ana a fines de los ‘90; y más recientemente, en la última década, en los departamentos Trancas (en Chuscha) y Burruyacu, al norte de Tucumán. Era de esperarse, entonces, que la especie se encontrara también distribuida entre ambos puntos. El registro en el marco del proyecto Lifeplan es novedoso y relevante porque confirma su presencia en el Parque Sierra San Javier. También destaca la importancia de los relevamientos a largo plazo, como el realizado en el marco de Lifeplan: zorros, mayuatos, ocelotes y hurones ya nos eran familiares, y de pronto este nuevo registro nos genera nuevas preguntas: ¿se tratará de un individuo que se encontraba de paso, o se encuentran poblaciones ya establecidas de coatíes en la zona? ¿Cómo se llevará con los perros sueltos, que representan su principal amenaza según la categorización SAyDS-SAREM, 2019? Esperamos poder responderlas y conocer más sobre la presencia de estos animalitos en nuestras selvas en estos próximos meses.